La mayoría de los negocios se encuentran ya en la red: muchas personas trabajan en portales, páginas webs, tienen e-commerce, y todos ellos necesitan de un servidor que les permita albergar toda su información. La mejor opción suele ser contar con un servidor, pero muchos no saben cómo hacerlo o qué es; por ello, en este artículo vamos a hablar sobre cómo configurar un VPS desde cero.
Un VPS no es más que un servidor privado que se consigue cuando se contrata un hosting y que sirve para contener o almacenar la página web. Consiste en alquilar una parte de un servidor físico, el cual se puede dividir en múltiples partes: cada una de ellas sería un servidor virtual.
El servidor físico es el elemento que asigna los recursos, como la instalación de los sistemas operativos y demás. Los VPS son una alternativa a los servidores compartidos, pues son muy seguros y ofrecen una serie de recursos privados muy importantes para el desarrollo y proyección del sitio web. Se podría decir que un VPS es el servicio intermedio entre un servidor dedicado y uno compartido. Funciona muy bien cuando se posee una página web con un tráfico medio; si el tráfico creciera, se necesitaría algo más avanzado, por lo que habría que invertir más dinero.
Toda esta terminología puede resultar un poco confusa para muchas personas, pues para quienes no están en el ambiente informático, es complejo saber qué es y para qué sirve cada cosa. Por eso, desde ServidoresNube vamos a explicar qué pasos habría que dar para configurar un VPS desde cero.
¿Cómo configurar un VPS desde cero?
Al empezar a usar un VPS, es importante que una serie de pasos se lleven a cabo para cumplir el objetivo de no tener problemas y lograr un funcionamiento óptimo. A continuación, se enumeran algunas de las acciones que se deben realizar en el momento de comenzar a trabajar con uno de ellos.
Instalar el sistema operativo
Uno de los pasos más importantes es elegir el sistema operativo que va a tener el VPS que se utilice. Lo normal es que el proveedor de este servicio ofrezca una amplia gama de posibilidades; para que os familiaricéis con el tema, los principales son Ubuntu, Debian y CentOS.
También suelen mostrar, como nosotros, otras opciones. Informan de que, aunque pudiera parecer lo contrario, las versiones recientes no siempre son las mejores, dado que aquellas que llevan más tiempo pueden ser controladas mejor y detectar los fallos de una forma más sencilla. Una vez que se tenga instalado todo, se obtendrá una dirección IP.
Conectarse a través de SSH
Una vez que el sistema esté ya preparado y se pueda poner en funcionamiento, será el momento de conectarse a través de SSH. Allí habrá que registrase con usuario y contraseña. Esto se puede hacer usando Putty, que es un cliente SSH que favorece la posibilidad de conectarse en entornos Windows. De esta forma, se podrá ejecutar una amplia variedad de comandos imprescindibles para la gestión de un servidor VPS.
Posteriormente, habrá que poner el nombre de usuario, el hostname y el puerto al que se va a conectar. El siguiente paso es introducir la contraseña del VPS. Si la instalación se está llevando a cabo a través de un sistema en Debian, los comandos que deberemos usar, y que son a fin de cuentas los más comunes, son apt-get, cp, cd, mv, mkdir, apt, sudo o chmod, entre otros.
Cambiar el nombre de nuestro host
El host suele venir con un nombre predeterminado junto a su servidor VPS; debido a que suele ser bastante complicado de memorizar, lo ideal es personalizarlo con un nombre más vinculado a cada usuario y a la dirección IP. Para hacer esto, hay que acceder desde la terminal; además, hay que tener en cuenta que el usuario root no es seguro, por lo que hay que tener otro diferente.
Actualizaciones en el sistema
Cuando se inicia por primera vez un VPS, es necesario realizar una actualización completa del sistema. Hay que utilizar la última versión disponible con todos los paquetes para tenerlos a punto. De esta forma, se evitarán vulnerabilidades y se conseguirá un mejor rendimiento.
Crear otro usuario
Al principio se usará el usuario del administrador, pero posteriormente es necesario crear uno más allá del root. Además, se podrán dar ciertos privilegios de administrador, lo que es muy útil para evitar problemas en la configuración.
Cambiar la fecha y hora
Es normal que el servidor VPN no tenga la hora configurada correctamente, por lo que es imprescindible introducir la zona horaria correcta para no tener ningún problema con el servidor.